No sé lo que me pasa. Déjame solo. No te lo voy a contar. O simplemente el silencio por respuesta. Estas son algunas contestaciones que nos encontramos cuando tratamos con un adolescente. Si hay algo que caracterice esta época es la confusión. Y no solo en los chavales, si no también en los padres que no saben qué le puede estar pasando a su hijo/a o cómo podrían ayudarle.
En la adolescencia, la relación con los padres cambia. Para los adolescentes, ahora los padres parecen estar en contra de ellos. Nada más lejos de la realidad. Es una época muy dificil para todos. Ahora, los jóvenes se centran más en su círculo de amigos, se encierran en sí mismos o se obsesionan con los videojuegos para evadirse de la realidad.
Como Terapeuta de Adolescentes os puedo ayudar a entender a vuestro hijo o hija. El trabajo que hago con los chavales puede marcar la diferencia. Entra a terapia una persona sin iniciativa, confundido o apático y al cabo de los meses, sale otra persona totalmente distinta: con las ideas claras, más comunicativo y apuntando directamente al foco de lo que quiere conseguir. ¿Por qué no probar una terapia para adolescentes que funciona? Piensa en todo el sufrimiento que le ahorrarás a tu hijo en una etapa tan difícil como es la adolescencia.